Ayer me levanté tempranito y aprovechando que el viento va aflojando decidí ir hacia Las Playitas a revisar de nuevo y con más calma las rocas que os conté la semana pasada. A las 10 estoy en la zona y el día pinta bien ya que el agua está calmada y cristalina. Empiezo a mirar agujeros y nada de nada. Se ven sargos reales pequeños y salmonetes a la entrada de las cuevas. Tras más de dos horas con tan sólo un tiro y un salmonete gordo en el pasapeces voy a mirar unas grietas donde de vez en cuando se ve algún merito. Varias bajadas después veo una cabezita en una roca aislada. Vuelvo a bajar y tras alumbrar con la linterna por una entrada muy pequeña veo un marroncito en el fondo de su cueva. Sin apenas espacio para alumbrar y preparar un buen tiro meto el fusil de 90 y disparo. Ahora empieza el calvario. El agujero es profundo, el mero está enrocado y además no estoy seguro de que el tiro haya sido muy bueno. Tiro con fuerza una y otra vez de la varilla pero nada. Tras un buen rato decido segundo disparo con el 75 para intentar matarlo. Bajo, alumbro y casi sin espacio apunto a la cabeza. Debe de estar muerto pero ni tirando con todas mis fuerzas de las dos varillas consigo sacarlo. El nylon de la varilla del 90 se rompe y después se me desgarra lo que me dice que el primer disparo fue muy malo. Llevo más de una hora y estoy agotado. He tenido varios amagos de cortar nylon del 75 y para casa pero hago un último intento. Desciendo, meto la mano hasta el fondo de la cueva para llegar a la varilla y vuelvo a tirar con todas mis ganas. Parece que cede y al final....sale. No es una gran pieza pero el trabajo que me ha dado la convierte en una bonita captura. Espero que el próximo sea más grande y ..... no se enroque.
que buenas aventuras da la pesca submarina,me alegro que te guste pero cuando vuelvas a ir coje 2 y asi me das uno a mi!!!jejeeje
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